lunes, 1 de agosto de 2011

Cedulación venezolana manejada desde Cuba

El hecho de que Cuba tendrá toda la información de los venezolanos para la creación de las cedulas electrónica, es comparado por el ingeniero Felix Arroyo como si el Ejercito le diera la nomina de los soldados a otro país. “¡Esto es inaudito!”, exclama.
El gobierno cubano tiene manos libres para expedir documentos oficiales de identidad a los venezolanos y controlar por esta vía, la entrega de cédulas electrónicas con la que los electores votarán en los comicios del año próximo.
Arroyo considera grave que la base de datos de la cedulación electrónica la va a manejar Cuba, ya que esa información es cuestión de seguridad de Estado.
-Yo no veo mal que cualquier país desarrolle el software y el chip para colocárselo a las cedulas electrónicas, eso es normal, Venezuela no produce chips ni software. Lo que me preocupa es que la administración de la cedula va a ser en Cuba, advierte Arroyo quien es coordinador de la Comisión Electoral de la MUD.
Refiere que el software quizás lo hagan en México, porque Cuba no tiene la capacidad tecnológica para hacerlo. “Aparte de eso, va a ser con software cerrado, es decir, los venezolanos no podrán ver qué es lo que contiene el software, como por ejemplo, se puede ver el software de las maquinas electorales, las cuales sí se pueden auditar”.
Alerta que cualquier cambio que hiciera la empresa cubana contratada, no lo podremos ver ni saber los venezolanos.
-La base de datos, que es lo más importante, la tiene que manejar Venezuela porque eso es seguridad de Estado, mucho mas allá de la parte electoral, lo que más preocupa es que es una cuestión de seguridad de estado.
Cuba: ¿amigo o enemigo?
Arroyo advierte que Cuba va a tener toda la nómina de los venezolanos, al respecto dice: “Esa información la va a tener otro país -sea amigo o enemigo- según como lo quieras ver, porque inclusive eso de que Cuba es amigo de Venezuela no lo creo, será que es amigo del 48% de los venezolanos”.
-Este país “amigo” en el pasado invadió a Venezuela y que ironía, son los cubanos, quienes van a tener la nómina de todos los venezolanos, con su dirección, teléfono, todo lo que tiene Saime lo van a tener ellos. Uno cuando va a renovar la cedula, le piden un montón de información que está allí. Además, ellos tienen los prontuarios de los extranjeros, donde aparecen quienes son los padres, los hijos…
-Todo lo que le piden a uno cuando se va a sacar la cedula por primera vez, es lo que van a tener los cubanos. Imagínate que yo sea un enemigo de cualquier país y entonces ellos tengan la dirección mía, la dirección de mi padre, de mi familia, hijos, eso no puede ser, es como si me dijeras que el ejercito le va a dar la nómina de soldados, a otro país, ¡eso es inaudito!
-Lo más grave de todo esto es que la empresa cubana contratada Albet, no produce el policarbonato para hacer las cédulas, ni el software, por tal motivo tiene que subcontratar a otras empresas, estoy seguro que no entrarán en este proceso las empresas venezolanas.
Implicaciones electorales
Por otra parte, Arroyo refiere el tema electoral: “La participación cubana en el sistema de cedulación tiene graves implicaciones electorales, si ellos pueden borrar y añadir información al banco de datos”.
Sin embargo, el rector Vicente Díaz aseguró que serán auditados los softwares. “El Saime emitirá cédulas a partir de la información que le suministre el CNE”.
Díaz aclaró que el CNE tiene competencia exclusiva sobre el Registro Civil. “No podrá emitir una sola cédula diferente a la información que le demos y los sistemas del CNE son objeto de consulta. En la licitación van a participar empresas venezolanas que consideren que tienen competencias para esto”.
Quien tenga una cédula venezolana tendrá respaldo de su partida de nacimiento en los registros civiles o constancia de su nacionalización en Gaceta Oficial.
Aseguró que el proceso estará sujeto a los protocolos de auditorías del CNE y de los partidos políticos. Añadió que para las elecciones presidenciales de 2012 la mayoría de la población votará con la cédula laminada vigente hasta ahora.
Entre tanto, Arroyo cree que los acuerdos suscritos con Cuba en materia de identificación, deben someterse a la revisión de la Asamblea Nacional. “Es muy grave, se les está dando acceso a la nómina de todos los que vivimos en Venezuela”.
Subraya que el Consejo Nacional Electoral ha negado a los partidos políticos los datos del Archivo de Venezolanos Cedulados, base del Registro Electoral, para hacerle una evaluación. La cédula es, además, el documento necesario para ejercer el derecho al voto.
Arroyo añade que los partidos de la MUD analizarán el alcance de los cubanos en el sistema y pedirán investigar el Servicio Administrativo de Identificación y Extranjería.
Seguridad o inseguridad nacional
Por su parte la directora de la organización Control Ciudadano, Rocío San Miguel, le preocupa que, al estar la nueva cédula electrónica en manos de una empresa oficial cubana, pueda ser vulnerada información estratégica del Estado.
“El sistema de identidad de cualquier país es un elemento esencial de seguridad nacional, junto con el de registros y notarías, que han estado bajo el esquema de participación cubana”, advierte San Miguel.
Según un documento entregado a El Nacional, por el ingeniero venezolano Anthony Daquin, ex asesor del ministerio de Interior y Justicia, la empresa cubana Albet Ingeniería y Sistemas resultó favorecida con un contrato secreto de 172 millones de dólares para poner en práctica el proyecto de la cédula electrónica venezolana.
Este contrato se realizó bajo un acuerdo en el que se excluye la participación de técnicos venezolanos y se asegura a los cubanos el control del software. Albet subcontrató a la multinacional Gemalto para que le proveyera las tarjetas de policarbonato y los programas informáticos.
El contrato entre Albet y Gemalto, por 40,5 millones de dólares, está fechado en La Habana, en agosto de 2008. En el documento se refiere al Ministerio de Interior y Justicia de Venezuela como el “cliente final”, el que usará los bienes y servicios transados.
El ex asesor Daquin, citado por el periódico, dijo que se vio forzado a pedir asilo en Estados Unidos por atreverse a criticar el convenio, que permite a las autoridades cubanas “incluir o borrar información de las bases de datos”.
De acuerdo con el ingeniero, quien además señaló que a todo el que ha objetado el convenio lo han amenazado, el gobierno cubano también puede “expedir documentos de identidad venezolanos a ciudadanos de otros países”.
La cédula electrónica incluirá en el chip el nombre y apellido, fecha de nacimiento, fecha de expiración, las huellas dactilares, el registro de información fiscal (datos sobre el pago de impuestos al Seniat), firma y foto. También se ha hablado de incluir el tipo de sangre y la historia médica.
Según los documentos a los que accedió El Nacional, los cubanos tienen facultades para subcontratar los bienes y servicios a nombre de Venezuela; sus técnicos trabajan en los programas informáticos que regirán el proceso de identificación y tienen garantizado el acceso a la data.

FUENTE: Revista Zeta Nº1812, 15/Julio/2011
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