Mantente informado de los últimos acontecimientos y novedades, de la gestión del Consejo Comunal de la urbanización y de como nos hace falta tu colaboración. Solo trabajando juntos podremos mejorar nuestra calidad de vida. Unete al grupo! Participa!
lunes, 31 de diciembre de 2012
martes, 11 de diciembre de 2012
FELIZ NAVIDAD PARA TODOS
Estimados vecinos:
Los vecinos que conformamos el consejo comunal les deseamos a todos una muy FELIZ NAVIDAD y un año 2013 pleno de PAZ, ÉXITO y SALUD... y para nuestro querido país: mucha sabiduría...
FELIZ NAVIDAD Y PROSPERO AÑO 2013, les desea el consejo comunal!!
lunes, 10 de diciembre de 2012
Unidad, unidad, unidad
El
pasado viernes, a esta hora, estábamos todos impactados con los videos que nos
mostraban la llegada del Presidente Chávez a Maiquetía, en la madrugada de ese
mismo día. El Presidente había aparecido de sorpresa.
Comentamos
en ese momento que el Presidente nada dijo de su salud, el Presidente nada dijo
del Mercosur – que era la noticia fundamental del día – y nada dijo, en
realidad, del cuadro político del país. Básicamente soltó una que otra
humorada, se definió como “la llamarada de Fidel”, etcétera, etcétera.
Pero
vino el día sábado –habían transcurrido apenas unas cuantas horas – y la
sorpresa fue mayúscula. La noche del día sábado resulta que el Presidente da
una cadena, se rodea no de su gabinete sino de un grupo de sus ministros, muy
bien seleccionados. A su derecha Diosdado Cabello, a su izquierda Nicolás
Maduro. Y allí el Presidente sorprende a todos. Dice: “Tengo que viajar de nuevo,
me aparecieron de nuevo células cancerígenas en el cuerpo y debo someterme a
una nueva operación.” No lo dijo, pero todo indicaba que el
pronóstico era de cuidado.
¿Para
qué vino entonces en medio de una circunstancia de salud tan terrible?
A ver…
Dice el Presidente que vino para pedirle permiso a la Asamblea Nacional. En un régimen
que poco se ha detenido a cuidar las formas de la Ley, de la Constitución, este
argumento no pareciera tener mucho peso. De hecho, en el debate de ayer en la
Asamblea Nacional –entre gritos e histerias – más de una de las diputadas
oficialistas dijo que no se iban a detener en “leguleyerismos, leguleyerías”…
Jugaron con todas las palabrejas parecidas.
¿A qué
vino el Presidente?
El Presidente
vino, fundamentalmente, a exigir unidad. En varias oportunidades repitió la
palabra “unidad, unidad, unidad, unidad…” Y vino para decir, sencillamente, que
Nicolás Maduro era el encargado de manejar la presidencia hasta el 10 de enero.
Y si, por alguna consideración, él no estaba el 10 de enero, pedía a sus
seguidores – es decir, al chavismo – que le eligieran Presidente.
Esto
deja de por medio una gran cantidad de consideraciones, de dudas. Ya en su
momento serán analizadas, pero por lo pronto lo que está de bulto, lo
fundamental, es el hecho político. El Presidente vino a decir “es Nicolás
Maduro”, no Diosdado Cabello, y lo dijo teniendo al lado, precisamente, a
Diosdado Cabello. La cara de Cabello, impactante. La cara de susto, de
abrumado, de Maduro, impactante también.
Así será
la desunión, la pugnacidad interna en el chavismo que el Presidente se vio obligado
a venir a decir esto desde el Palacio de Miraflores, porque no valía una
declaración desde La Habana. Además, ¡atención!, muchas consideraciones a lo
que él definió como
“mi amado Ejército, mi amada Fuerza Aérea, mi amada Armada, mi amada
milicia.” Hubo un énfasis muy especial, también, en la unidad
de la Fuerza Armada.
Lo que
viene por delante ahora, para todo el país, es un período difícil. Es un trance
bastante complicado el que nos espera. Y si el Presidente pidió unidad para los
suyos, pues también es pertinente entonces pedir unidad para los que no están
con el Presidente, porque es un momento donde las fuerzas opositoras también
deberían tener un liderazgo claro y acentuar su unidad.
Pero yendo
más allá, si lo que nos viene es difícil, para que no sea tan traumático,
es importantísimo convocar a la unidad de todos los venezolanos. En definitiva,
es lo que somos, ¿no? Estemos del lado que sea, políticamente hablando.
Tomado
de: www.cesarmiguelrondon.com/editoriales - 10 de Diciembre de 2012
viernes, 7 de diciembre de 2012
¿VOTAR? ¿PARA QUE?
Algunos se preguntan para qué votar el 16 de diciembre. Como que creen que no vale la pena, que el CNE hace trampa, que el ventajismo del Estado es muy grande. Pues, no votar es no hacer absolutamente nada por evitar el avance de la destrucción del país.
La lista de razones para votar es infinita, aquí va un abreboca. Votar, para rechazar la inseguridad con sus muertes y secuestros, que no son una "percepción"; para decirle NO al estado comunal anticonstitucional, que fue rechazado en el referendum del 2 de diciembre de 2007, y para decirle NO a la resolución 058 que pretende entregar las escuelas, liceos y colegios, a los consejos comunales. Votar para defender la Constitución y decir no a sus constantes violaciones; por la separación de poderes y la imparcialidad de la FFAA.
Votar para rechazar que los campesinos no tengan semillas ni insumos, ni puedan vender sus productos, ya que los importados con dólares preferenciales, les cierran las puertas. Votar para rechazar que la lechuga verde haya duplicado su valor en tres meses, y esos costos ya los hayamos absorbido los consumidores, aunque digan que la lechuga no existe, y que la inflación tampoco.
Votar para que se acaben las vacunas para vivir, para tener un negocio o un trabajo, o para comprar un carro. Votar para que se haga algo con los motorizados que perturban seriamente la circulación por la ciudad, amenazan y atropellan y chantajean.
Votar para defender los derechos humanos, para exigir que se haga justicia a personas como la jueza Affiuni y a los presos políticos; para que no se engañe más al país con abogados que se gradúan con tres años de estudios, y médicos con cuatro. Votar para que se desarrolle una política habitacional planificada, eficiente, sin corrupción, con servicios y correctos diseños urbanos, que desarrolle el empleo y el conocimiento de los venezolanos.
Votar para defender una economía productiva y que no se siga hipotecando el futuro de nuestros hijos, endeudando al país, para regalar lavadoras y electrodomésticos que buscan comprar votos; para rechazar las vías en mal estado, para rechazar que se prohíba hablar de los crímenes ecológicos y para que se enjuicien los responsables de Pudreval y del maletín del gordo Antonini.
Votar, para decirle NO a este CNE desequilibrado que no pone límite al uso de los recursos del Estado para apoyar los candidatos del gobierno, situación que viola la Constitución. Votar para que como venezolanos no tengamos que seguir pasando la vergüenza de ver cómo se regala la espada de Bolívar a gorilas como Kadafi.
Votar para que no se asocie el triunfo de nuestros deportistas, con el color electoral del gobierno. Votar porque la Orquesta Nacional Juvenil es orgullo de todos los venezolanos y no es producto de este gobierno. Votar para que se resuelva el problema del lago de Valencia, y los vecinos no tengan que sufrir más esa situación insostenible. Votar para que se acaben las cadenas interminables de TV.
Tomado de: TalCualDigital.com / Opinión / 07/12/2012
NOTA: lo resaltado va por la casa.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)